LA REVOLUCIÓN GLORIOSA (1688).

La Revolución Gloriosa de 1688 fue un acontecimiento de gran relevancia en la historia de Inglaterra y Europa, pues marcó el establecimiento definitivo de la monarquía constitucional en el país, con una transición de poder relativamente pacífica en comparación con otras revoluciones europeas. Esta revolución significó la destitución del rey Jacobo II y la instauración en el trono de Guillermo III de Orange y su esposa, María II, en un proceso que consolidó la preeminencia del Parlamento sobre la monarquía.

Para comprender la Revolución Gloriosa, es necesario analizar el contexto político y religioso de Inglaterra en el siglo XVII. Tras el gobierno de Isabel I, el trono pasó a la dinastía Estuardo con Jacobo I en 1603. Su gobierno y el de su hijo, Carlos I, se caracterizaron por conflictos con el Parlamento debido a la concepción absolutista de la monarquía. Estos desencuentros desembocaron en la Guerra Civil Inglesa (1642-1651), que resultó en la ejecución de Carlos I y la instauración de la Commonwealth liderada por Oliver Cromwell.

El interregno de Cromwell terminó con la restauración monárquica en 1660, cuando Carlos II regresó al trono. Durante su reinado, se gestaron las bases para las tensiones que explotarían en 1688, pues aunque Carlos II mantuvo la apariencia de una monarquía parlamentaria, favoreció a los católicos en ciertos momentos, lo que generó desconfianza entre los anglicanos y parlamentarios. En 1685, su hermano, Jacobo II, un católico declarado, ascendió al trono, exacerbando el temor de que la nación regresara al catolicismo.

Jacobo II implementó una serie de políticas que generaron amplio rechazo. En primer lugar, intentó revocar las leyes discriminatorias contra los católicos y disidentes protestantes mediante la Declaración de Indulgencia de 1687, lo que desafiaba el control parlamentario sobre la religión. También destituyó a funcionarios anglicanos y reemplazó a jueces con personas leales a él. Adicionalmente, fortalecó el ejército con oficiales católicos, una decisión alarmante en un país de mayoría protestante.

La situación se volvió crítica en 1688, cuando la esposa de Jacobo, María de Módena, dio a luz a un heredero varón, lo que aseguraba la continuidad de una dinastía católica. Hasta entonces, los opositores de Jacobo II esperaban que su hija mayor, María, casada con el protestante Guillermo de Orange, heredara el trono, lo que mantenía la esperanza de un futuro protestante para Inglaterra. El nacimiento del heredero disipó esta posibilidad, acelerando las acciones para deponer a Jacobo.

En junio de 1688, un grupo de influyentes nobles y parlamentarios, conocidos como los "Siete Inmortales", enviaron una invitación a Guillermo de Orange para intervenir en Inglaterra y asegurar la continuidad protestante. Guillermo, que ya tenía intereses estratégicos en la región, aceptó la propuesta y organizó una expedición militar.

El 5 de noviembre de 1688, Guillermo desembarcó en Torbay con un ejército de aproximadamente 14,000 hombres. Su avance fue rápido, encontrando poca resistencia, ya que muchos oficiales y soldados desertaron del ejército de Jacobo II. A medida que Guillermo avanzaba hacia Londres, Jacobo intentó negociar, pero su situación era insostenible. Su esposa e hijo huyeron a Francia, y él intentó hacer lo mismo, pero fue capturado. Finalmente, se le permitió exiliarse en diciembre de 1688, refugiándose en la corte de Luis XIV de Francia.

El Parlamento convocó una convención en 1689 para determinar el futuro del trono. Se resolvió que Jacobo II había "abdicado" al huir, lo que permitió la coronación conjunta de Guillermo III y María II en abril de 1689. Este evento fue seguido por la aprobación de la Declaración de Derechos (Bill of Rights), un documento clave que limitó los poderes del monarca y estableció la supremacía del Parlamento. Entre sus disposiciones estaban:

- La prohibición de suspender leyes sin consentimiento parlamentario.

- La garantía de elecciones parlamentarias libres y regulares.

- La protección de la libertad de expresión en el Parlamento.

- La restricción de mantener un ejército permanente sin la aprobación del Parlamento.

La REVOLUCION también tuvo repercusiones en Escocia e Irlanda. En Escocia, Guillermo se enfrentó a la resistencia jacobita, que fue derrotada en 1690. En Irlanda, Jacobo II intentó recuperar el trono con apoyo de Luis XIV, pero fue vencido en la Batalla del Boyne en 1690, consolidando el dominio protestante en el país.

En el ámbito internacional, la revolución reforzó la posición de Inglaterra como una monarquía constitucional y afianzó la alianza con los Países Bajos. También inspiró otras revoluciones y sentó un precedente para la limitación del poder real en Europa. Además, la consolidación del poder parlamentario preparó el camino para la futura Revolución Industrial, al crear un entorno más estable para el comercio y la economía.

La Revolución Gloriosa de 1688 fue un hito fundamental en la historia británica y mundial. No solo aseguró la continuidad de un gobierno protestante en Inglaterra, sino que también estableció principios clave de la democracia parlamentaria moderna, inspirando las posteriores revoluciones americana y francesa. Su legado perdura en las democracias actuales, donde la limitación del poder ejecutivo y la supremacía de las leyes continúan siendo pilares fundamentales del gobierno representativo.

JOSÉ ANTONIO OLMOS GRACIA.

Policía local de profesión, desarrolla su cometido en la categoría de oficial en el municipio de Huesca, contando con 16 de servicio y varias distinciones. A pesar de que su afán por la historia le viene desde pequeño, no fue hace mucho cuando se decidió a cursar estudios universitarios de Geografía e Historia en UNED y comenzar en el mundo de la divulgación a través de las redes sociales. Actualmente administra el blog elultimoromano.com así como páginas en Instagram y Facebook con el mismo nombre. Además, colabora con revistas, páginas, asociaciones, blogs, podcast y es miembro de Divulgadores de la Historia.



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Bibliografía:

- LA EDAD MODERNA (SIGLOS XV-XVIII) 2016Autor/es: Luis Ribot;
Editorial: : MARCIAL PONS HISTORIA